¡Sorpresa! El TS avala la deducción de los gastos financieros

El Tribunal Supremo ha dictado, de nuevo, una resolución contraria a las tesis de Hacienda respecto a los gastos deducibles en el Impuesto sobre Sociedades.

En esta ocasión, el TS avala la deducción de los gastos financieros de préstamos de la Sociedad aunque ésta tenga fondos propios suficientes. La empresa en cuestión había utilizado el dinero del préstamo para el pago de dividendos y adquisición de participaciones propias en un momento de debilidad de tesorería, y hacienda había considerado que no tenía la suficiente correlación con los ingresos para considerarse como gasto deducible. Ahora el Tribunal ha tumbado ese criterio administrativo.

Es habitual que el Tribunal vaya contradiciendo los criterios administrativos de hacienda cada vez que este organismo decide mezclar criterios empresariales con criterios impositivos. Hace tiempo que la administración intenta decir a las empresas cómo deben gestionarse para obtener los ingresos, señalando qué es deducible y qué no lo es. El criterio general "es deducible cualquier gasto necesario para generar los ingresos" hace que, a menudo, sea hacienda quien interprete qué gastos son necesarios y cuáles no, cuando, en realidad, es la empresa la que conoce este aspecto, no la Administración. Parece como si, en su voluntad de incrementar la recaudación, cada vez se sacaran nuevos criterios de la manga que acaban chocando con resoluciones judiciales que las refutan.

¿Qué otras deducciones fiscales ha contradicho al Tribunal Supremo?

Ya hace dos años el propio Tribunal Supremo permitió la deducción de los gastos financieros por intereses de demora. Y no hace mucho, permitió la deducción de gastos de reuniones con clientes y proveedores, e incluso regalos a éstos y al personal, en contra, de nuevo, de los criterios administrativos ávidos de generar recaudación, sobre todo en empresas medianas.